Decía mi amigo Luis que el mejor sitio para escuchar música es el coche, de viaje. Yo añado el transporte público o tus pies. Te pones los auriculares y tu día se convierte en una peli con banda sonora. O en un anuncio de galletas. Depende de lo que escuches, claro. Y de si hace sol o no.
Sabes esa sensación de que todas las canciones te apuntan con el dedo. Da yuyu a veces. Igual que ves embarazadas por todas partes cuando no te viene la regla y todo el mundo debate recetas si estás a dieta, supongo. Yo es que nunca estoy a dieta. Soy incapaz. Antes aprendo a escalar que controlar lo que como. Tengo el teléfono en modo shuffle cuando Xoel López empieza a acusar: "quién no tiene valor para marcharse". Turnedó va bien con la canción anterior, de Love of Lesbian, 1999. "El año que el noventaynueve llegó hasta abril". Y me digo que sí, que en ese momento, con ese viento, a este ritmo, entiendo perfectamente sus "putas ganas de seguir el show".
Me monto en el metro, línea 4 porque voy a Malasaña. Qué manía tienen algunos tíos de ocupar la totalidad del espacio. Comparte tres paradas con este tipo de sujeto masculino y sabrás a lo que me refiero. Las piernas abiertas que ni un ecarté, los codos desbordando el reposabrazos. Una cruz. Y él también está tirando de banda sonora particular. No sabes qué es pero imaginas que le ha salido el mensajito en el reproductor sobre los límites recomendados de volumen .
Salgo una parada antes porque no quepo ya en mi asiento, porque tengo tiempo y porque me gusta caminar por ese barrio. Paso por la puerta de la cafetería Santander y Sabina me cuenta la historia de aquél pobre que "puso a su nombre todas las olas del mar". Y canturreo. "Mucho mucho ruido tanto tanto ruido". Y me acuerdo de que he conseguido entradas para la segunda fecha de diciembre. Y miro hacia arriba, a los lagartos del edificio de Mejía Lequerica. Termina mi cuento madrileño el cuento barcelonés de la Negra Flor. Otro día te cuento el cuento de alguna playlist en inglés. Y contemporánea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario